Carla Figueroa conoció a su único
amor a los 13 años. Corría el 2005 y conoció a Marcelo Tomaselli en su pequeño pueblo de General pico, en La
pampa. Él tenía 19 años y le pintó el mundo de colores. A los tres años
ella se embarazó, tenía 16 años y él 22, se mudaron juntos y tuvieron un varón.
Como todo lo que empieza rápido
termina mal se separaron en 2011, con un
bebe de 3 años. Pero la historia estaba muy lejos de terminar.
El 14 de
abril de ese año él la fue a buscar al trabajo, la amenazó con un cuchillo y la
violó repetidamente. Ella lo denunció.
Su testimonio televisivo fue
escalofriante. De espaldas a la cámara relató maltratos y calvarios, tenia 19
años y había pasado de todo pero su pesadilla estaba lejos de terminar. Tomaselli
fue detenido por “abuso sexual agravado por uso de arma”.
Pero
mientras transcurría la instrucción de
la causa, Carla se arrepintió y pidió su
libertad. Ella, con el patrocinio del abogado Raúl Quiroga, y Tomaselli, con el
de Armando Agüero, pidieron que se les conceda el avenimiento.
En una
primera instancia, el 4 de octubre la Audiencia de Juicio de General Pico negó
por unanimidad el recurso. El tribunal, conformado por Alfredo Alonso, Florentino
Rubio y Carlos Federico Pellegrino, consideró que la joven no estaba en
condiciones de dar un consentimiento libre y pleno, dada la situación de
violencia que había vivido hacía poco. Tomó en cuenta un informe que advertía
sobre “el colapso psicológico” que le provocó la violación, cuyas secuelas
“perduran en el tiempo”. Al mismo tiempo, el tribunal sostuvo que al momento
del hecho no existía ninguna relación entre ambos.
Pero la
pareja apeló el 18 de octubre. Mientras
el acusado seguía preso, se casaron por civil el 28 de octubre. El fiscal
Alejandro Gilardenghi también se opuso al avenimiento. Alegó que era evidente
“la presión ejercida sobre la víctima”, quien no había contado a lo largo del
proceso “con ningún tipo de contención”. A criterio del fiscal el pedido de
avenimiento era una estrategia “defensiva” del imputado.
Con la
apelación, el caso llegó al Tribunal de Impugnación Penal de la provincia,
integrado por los jueces Pablo Tomás Balaguer, Carlos Antonio Flores y Gustavo
Adolfo Jensen. El fallo fue dividido. Balaguer se pronunció en contra del
avenimiento, retomando argumentos de la sentencia de la Audiencia de Juicio.
Flores, a favor. Finalmente, Jensen, a cargo de la presidencia del Tribunal,
inclinó la balanza y apoyó la propuesta de la víctima y su victimario. Flores
fundamentó su voto al señalar que la propuesta de la joven “luce real y
sincera, libre, sin presiones” y que “desea que la causa se termine para lograr
una adecuada convivencia familiar”. Así, el 2 de diciembre el Tribunal concedió
el avenimiento.
Pero la
feliz vida de casados duró 8 días. Tomaselli culpó a Carla de su tiempo preso y
la mató a cuchilladas en la madrugada del 10 de diciembre. Estaban presente el
hijito de ambos y la mamá de él. “Carla me miraba y me estiró los brazos
mientras la apuñalaba” declaró la madre de él.
Tomaselli
fue detenido de inmediato y el 13 de diciembre le dictaron prisión preventiva.
En la primera jornada del juicio se declaró culpable
El 28 de
junio de 2012 fue efectivamente condenado a perpetua por homicidio agravado por
el vinculo y los jueces Jensen y Flores fueron mandados a Jury. Jensen se
jubiló, Flores fue absuelto.
la figura
del avenimiento quedó cuestionada. El “avenimiento” o “reconciliación” está
contemplada en el articulo 132 del Código Penal y establece que en casos de
violación y cuando haya relaciones afectivas preexistentes entre víctima y
victimario, el tribunal puede “excepcionalmente” aceptar la propuesta de ella
si fue formulada “libremente” y “en condiciones de igualdad y si considera que
es un modo más equitativo de armonizar el conflicto con mejor resguardo del
interés de la víctima”. Así se extingue la acción penal. Luego del caso
Figueroa el 21 de marzo del 2012 la presidenta derogo la figura del avenimiento
del código penal. Para carla llegó tarde.Carla Figueroa conoció a su único
amor a los 13 años. Corría el 2005 y conoció a Marcelo Tomaselli en su pequeño pueblo de General pico, en La
pampa. Él tenía 19 años y le pintó el mundo de colores. A los tres años
ella se embarazó, tenía 16 años y él 22, se mudaron juntos y tuvieron un varón.
Como todo lo que empieza rápido
termina mal se separaron en 2011, con un
bebe de 3 años. Pero la historia estaba muy lejos de terminar.
El 14 de
abril de ese año él la fue a buscar al trabajo, la amenazó con un cuchillo y la
violó repetidamente. Ella lo denunció.
Su testimonio televisivo fue
escalofriante. De espaldas a la cámara relató maltratos y calvarios, tenia 19
años y había pasado de todo pero su pesadilla estaba lejos de terminar. Tomaselli
fue detenido por “abuso sexual agravado por uso de arma”.
Pero
mientras transcurría la instrucción de
la causa, Carla se arrepintió y pidió su
libertad. Ella, con el patrocinio del abogado Raúl Quiroga, y Tomaselli, con el
de Armando Agüero, pidieron que se les conceda el avenimiento.
En una
primera instancia, el 4 de octubre la Audiencia de Juicio de General Pico negó
por unanimidad el recurso. El tribunal, conformado por Alfredo Alonso, Florentino
Rubio y Carlos Federico Pellegrino, consideró que la joven no estaba en
condiciones de dar un consentimiento libre y pleno, dada la situación de
violencia que había vivido hacía poco. Tomó en cuenta un informe que advertía
sobre “el colapso psicológico” que le provocó la violación, cuyas secuelas
“perduran en el tiempo”. Al mismo tiempo, el tribunal sostuvo que al momento
del hecho no existía ninguna relación entre ambos.
Pero la
pareja apeló el 18 de octubre. Mientras
el acusado seguía preso, se casaron por civil el 28 de octubre. El fiscal
Alejandro Gilardenghi también se opuso al avenimiento. Alegó que era evidente
“la presión ejercida sobre la víctima”, quien no había contado a lo largo del
proceso “con ningún tipo de contención”. A criterio del fiscal el pedido de
avenimiento era una estrategia “defensiva” del imputado.
Con la
apelación, el caso llegó al Tribunal de Impugnación Penal de la provincia,
integrado por los jueces Pablo Tomás Balaguer, Carlos Antonio Flores y Gustavo
Adolfo Jensen. El fallo fue dividido. Balaguer se pronunció en contra del
avenimiento, retomando argumentos de la sentencia de la Audiencia de Juicio.
Flores, a favor. Finalmente, Jensen, a cargo de la presidencia del Tribunal,
inclinó la balanza y apoyó la propuesta de la víctima y su victimario. Flores
fundamentó su voto al señalar que la propuesta de la joven “luce real y
sincera, libre, sin presiones” y que “desea que la causa se termine para lograr
una adecuada convivencia familiar”. Así, el 2 de diciembre el Tribunal concedió
el avenimiento.
Pero la
feliz vida de casados duró 8 días. Tomaselli culpó a Carla de su tiempo preso y
la mató a cuchilladas en la madrugada del 10 de diciembre. Estaban presente el
hijito de ambos y la mamá de él. “Carla me miraba y me estiró los brazos
mientras la apuñalaba” declaró la madre de él.
Tomaselli
fue detenido de inmediato y el 13 de diciembre le dictaron prisión preventiva.
En la primera jornada del juicio se declaró culpable
El 28 de
junio de 2012 fue efectivamente condenado a perpetua por homicidio agravado por
el vinculo y los jueces Jensen y Flores fueron mandados a Jury. Jensen se
jubiló, Flores fue absuelto.
Carla Figueroa conoció a su único
amor a los 13 años. Corría el 2005 y conoció a Marcelo Tomaselli en su pequeño pueblo de General pico, en La
pampa. Él tenía 19 años y le pintó el mundo de colores. A los tres años
ella se embarazó, tenía 16 años y él 22, se mudaron juntos y tuvieron un varón.
Como todo lo que empieza rápido
termina mal se separaron en 2011, con un
bebe de 3 años. Pero la historia estaba muy lejos de terminar.
El 14 de
abril de ese año él la fue a buscar al trabajo, la amenazó con un cuchillo y la
violó repetidamente. Ella lo denunció.
Su testimonio televisivo fue
escalofriante. De espaldas a la cámara relató maltratos y calvarios, tenia 19
años y había pasado de todo pero su pesadilla estaba lejos de terminar. Tomaselli
fue detenido por “abuso sexual agravado por uso de arma”.
Pero
mientras transcurría la instrucción de
la causa, Carla se arrepintió y pidió su
libertad. Ella, con el patrocinio del abogado Raúl Quiroga, y Tomaselli, con el
de Armando Agüero, pidieron que se les conceda el avenimiento.
En una
primera instancia, el 4 de octubre la Audiencia de Juicio de General Pico negó
por unanimidad el recurso. El tribunal, conformado por Alfredo Alonso, Florentino
Rubio y Carlos Federico Pellegrino, consideró que la joven no estaba en
condiciones de dar un consentimiento libre y pleno, dada la situación de
violencia que había vivido hacía poco. Tomó en cuenta un informe que advertía
sobre “el colapso psicológico” que le provocó la violación, cuyas secuelas
“perduran en el tiempo”. Al mismo tiempo, el tribunal sostuvo que al momento
del hecho no existía ninguna relación entre ambos.
Pero la
pareja apeló el 18 de octubre. Mientras
el acusado seguía preso, se casaron por civil el 28 de octubre. El fiscal
Alejandro Gilardenghi también se opuso al avenimiento. Alegó que era evidente
“la presión ejercida sobre la víctima”, quien no había contado a lo largo del
proceso “con ningún tipo de contención”. A criterio del fiscal el pedido de
avenimiento era una estrategia “defensiva” del imputado.
Con la
apelación, el caso llegó al Tribunal de Impugnación Penal de la provincia,
integrado por los jueces Pablo Tomás Balaguer, Carlos Antonio Flores y Gustavo
Adolfo Jensen. El fallo fue dividido. Balaguer se pronunció en contra del
avenimiento, retomando argumentos de la sentencia de la Audiencia de Juicio.
Flores, a favor. Finalmente, Jensen, a cargo de la presidencia del Tribunal,
inclinó la balanza y apoyó la propuesta de la víctima y su victimario. Flores
fundamentó su voto al señalar que la propuesta de la joven “luce real y
sincera, libre, sin presiones” y que “desea que la causa se termine para lograr
una adecuada convivencia familiar”. Así, el 2 de diciembre el Tribunal concedió
el avenimiento.
Pero la
feliz vida de casados duró 8 días. Tomaselli culpó a Carla de su tiempo preso y
la mató a cuchilladas en la madrugada del 10 de diciembre. Estaban presente el
hijito de ambos y la mamá de él. “Carla me miraba y me estiró los brazos
mientras la apuñalaba” declaró la madre de él.
Tomaselli
fue detenido de inmediato y el 13 de diciembre le dictaron prisión preventiva.
En la primera jornada del juicio se declaró culpable
El 28 de
junio de 2012 fue efectivamente condenado a perpetua por homicidio agravado por
el vinculo y los jueces Jensen y Flores fueron mandados a Jury. Jensen se
jubiló, Flores fue absuelto.
la figura
del avenimiento quedó cuestionada. El “avenimiento” o “reconciliación” está
contemplada en el articulo 132 del Código Penal y establece que en casos de
violación y cuando haya relaciones afectivas preexistentes entre víctima y
victimario, el tribunal puede “excepcionalmente” aceptar la propuesta de ella
si fue formulada “libremente” y “en condiciones de igualdad y si considera que
es un modo más equitativo de armonizar el conflicto con mejor resguardo del
interés de la víctima”. Así se extingue la acción penal. Luego del caso
Figueroa el 21 de marzo del 2012 la presidenta derogo la figura del avenimiento
del código penal. Para carla llegó tarde.